Tratando de encontrar balance

Fue por estas fechas hace dos años atrás que realice por primera vez seriamente un curso corto de meditación en la casa de una amiga budista llamada Ayu, su padre enseñaba "Qi gong", una técnica del manejo de la energía mediante la respiración. Nos reunimos cuatro personas en su casa en una ciudad llamada “Depok”. Lo interesante de aquella experiencia fue lo siguiente:
Para iniciar la meditación, Ayu debía tocar tres veces su gracioso “gong”.
Primer gong: Nos recuerda que debemos enfocarnos en el “estado” de meditación
Segundo gong: Nos recuérdanos que nuestro cuerpo debe estar firme asi que acabemos con los últimos movimientos.
Tercer y último gong: Para recordarnos (finalmente) que debemos comenzar la sesión.

Ya me encontraba feliz, meditando, con la brisa de aire húmedo y tibio que entraba por la ventana…(poco mas con pajarillos a mi alrededor bailando al son de Mozart) cuando de pronto el golpe de un martillo proveniente de la calle resonó en mis oídos forzándome a abrir mis ojos.

Observe de la ventana y vi que eran unos obreros que trabajaban en una construcción vecina.
Que golpes! Martillazos, grúas, gritos entre obreros...en esas condiciones era definitivo que no podía continuar con mi meditación!? Que soluciones tenia?... ir hacia la construcción y pedirles muy gentilmente que me dejen meditar? …no my “sabio” he?..Me pase toda la sesión pensando y atormentándome con soluciones “imposibles”… mire a Ayu ella toda tranquila… será que se durmió?

Al terminar la sesión me acerque a Ayu y le comente que no podía meditar con ese ruido, que debíamos mudarnos, ella me dijo suavemente como acostumbraba, Patricia…Si buscas meditar en un paraíso por una eternidad poco te servirá cuanto aprendas, recuerda lo del yin yang, debes aprender a encontrar tu balance en ambas circunstancias. Trata nuevamente, enfócate mujer! Estas aquí para meditar no para escuchar a los obreros!!

Debo aceptar que me quede desconcertada pero era difícil rehusar a Ayu una escritora de tres libros, fundadora de la “Satori Foundation” y finalmente mi amiga. Y ahora ella SOLO me pide que me “enfocara”?….me senté nuevamente, lo intente por horas, el primer dia fue un fracaso total, pero el segundo día después del almuerzo medite… luego del tercer gong, seguí lo enseñado…seguí y seguí con el procedimiento…medite…medite…y milagrosamente un gong me saco de mi meditación…abrí los ojos y luego de ver a Ayu y al resto sentados junto a mi me di cuenta que había meditado sin escuchar los obreros! Me acerque a la ventana y a mi sorpresa los vi preparando sus cosas dispuestos a retirarse.
Pregunte a Ayu “que momento terminaron estos obreros de trabajar?” y ella me contesto “mucho después que tu te fuiste”. La mire y entendí lo que ella implicaba, ella sabia que había finalmente logrado meditar, allí! sin la paz habitual de un lugar relajado, de un sitio “cómodo”….como las postales Zen de Hallmarck.

Dos años pasaron, mis experiencias por la vida me muestran la existencia de un paraíso y un infierno en la vida misma… aquí!... presente en el mundo terrenal, no hay que esperar a la muerte para verlo?... Nosotros balanceándonos entre uno y otro, caminando entre llamas y nubes…como una rueda, es a nosotros de caer en el eje o caer al borde de la rueda que sin piedad nos mueve a su gusto, nos arrastra a la crisis, la desesperación, la ansiedad, el miedo, la depresión, la ira…o peor el estrés que incrementa la segregación de la hormona “cortisol” que destruye la piel y disminuye el sistema inmune. Afecta la fertilidad y los huesos. Niveles altos de cortisol producen perdida de la memoria y diabetes de ciertos tipos. Las mujeres con mas grasa en el abdomen también sufren de altas y bajas en su estado de animo y niveles altos de estrés en su vida.Ahora me pongo a pensar, como puede ayudar mi experiencia de meditación en esta vida tan paradisiaca e infernal?

Una de las cosas que me saco del ruido de la construcción fue “el enfoque”. Si estamos estresados, iracundos o deprimidos en un momento dado es por una sencilla razón, estamos dándole toda (100%) de nuestra atención a un solo evento…ponte a pensar, cuantas cosas suceden a tu alrededor pero cuantas realmente te llaman la atención? Pocas cosas son absolutas la verdad es que el “como” estas enfocando una situación te dará como resultado tu estado emocional del momento. Todo el tiempo vivimos mas en reacción que en balance.

La verdad es que si cambiáramos de enfoque cambiaríamos la manera de evaluar, de preguntar y hasta de concentrarnos. Las personas mas exitosas cayeron financieramente algunas veces y lo mas interesante es que al leer sus escritos la mayoría se pregunta cosas descabelladas como “que puedo aprovechar de esta experiencia y hasta revertirla?”.

Resumiendo yo diría que si estas penetrando en alguna “crisis” o ira en este momento, mejor te das los tres gongs (de manera imaginaria) para cambiar tu enfoque:

1er gong: Cambia tu enfoque distrayendo tu mente de la situación con algo que te cambie tu estado emocional. Te gusta Bailar? Pon tu música favorita un momento, Reír? Recuerda tu momento mas feliz, dibuja la caricatura que te hiso reír. Sentir? Toca las flores, toca el agua, acude a tus sentidos.
2do gong: Reanaliza la situación y pregúntate como aprender y cambiar el evento, que tendrías que hacer o “dejar de hacer” para cambiar la situación, que otra opción (es) tienes.
3er gong: Acaba de planificar, actúa pero no olvides de disfrutar en el proceso (frutilla).

Durante mis meditaciones en la casa de Ayu, tres gongs eran necesarios para desviarnos del mundo exterior y enfocarnos en lo que íbamos a emprender pero solo un gong nos regresaba a la tierra. Recuerda que un solo gong es suficiente para distraer tu atención…no lo dejes controlar tus emociones.