Como controlar la ira (Segunda parte)

Hace un tiempo atrás escribí acerca de la ira y una de mis experiencias relacionada con la misma, grande fue mi sorpresa al ver que muchas personas se encuentran en el problema de la ira descontrolada, por eso he decidido escribir mas al respecto.
Comenzare contándoles acerca de mi jardín…seguro ya pensaste, “su jardín?” mejor leo otra cosa!…paciencia…todo esta relacionado. Como decía, tenia la suerte de contar con algunas rosas que eran mis favoritas, cada fin de semana las podaba, les ponía fertilizante, eliminaba la yerba, y muchas me regalaban hermosas flores…hace poco viaje por un tiempo largo, confiada que la persona a cargo de mi jardín seguiría mis instrucciones me fui. Recientemente regrese a Indonesia, mis rosas no daban una sola flor, las hojas están todas destrozadas por el gusano, sus tallos infectados. Con todo el dolor de mi corazón tuve que reemplazar muchas y volver a empezar en el cuidado.
La maravillosa naturaleza me estaba enseñando una lección sorprendente, TODO cuanto vive en este mundo necesita alimentarse de algo para vivir. Ahora este alimento varía según el ser. Como seres humanos dependemos cuando nacemos de alguien que nos de alimento para luego aprender a darnos ese alimento nosotros mismos. La vegetación necesita de agua, los animales viven de la caza, los mismos microorganismos viven de otros “seres”. Todo el mundo, el universo en si se encuentra poblado de este ciclo de alimentación y carencia. Si dejamos de comer, moriremos, en otras palabras “si dejamos de dar lo que alimenta al ser este se muere”. Ahora, será posible que este fenómeno se realice también con las emociones? Como por ejemplo la ira? La respuesta… SI!.
Construimos modelos de cómo vemos al mundo. Toda información es colectada de la experiencia en el pasado y la emoción ligada a ella. Si nos enojamos a diario, o sufrimos a diario, diseñamos e interconectamos una red nerviosa a diario. Y dicha red forma una red estrecha con los otros nervios que forman nuestra identidad. Esa identidad es lo que te presenta al mundo exterior a diario, quizás generes en otros miedo, odio, pena si tienes una actitud irritable… en el mejor de los casos generaras compasión pero jamás generaras amor. Piensa, como podrías tu amar a quien te trata con rabia cada vez que dices o haces algo espontaneo? Dicen que acciones quitan pasiones y matan las ilusiones.
Ahora, para eliminar la ira debemos empezar por eliminarla de raíz, en otras palabras dejar de alimentarla hasta que en algún momento …se muera. Las personas que no pueden controlarla son aquellas que han alimentado la ira hasta el punto que la emoción controla la persona y no a la inversa. En otras palabras son “adictos” a su emoción porque? Porque una adicción es algo que no se puede parar. Un adicto siempre necesita un poco más para saciar sus necesidades químicas.
Pero si quieres cambiar como comenzar? Lo más importante es contar con la certeza que se debe trabajar en ello con mucha motivación y voluntad. Recuerden que alimentaron demasiado a su emoción, ahora deben aprender a dejar de alimentarla. Deben pagar mucha atención a su comportamiento, como un vigilante esta a la expectativa de un ladrón. Yo comencé por hacerme consiente de mis emociones. Si alguna situación comenzaba a molestarme hasta el punto de ponerme furiosa yo recorría tres pasos:
1. Como me encontraba alerta podía reconocer en mi cuerpo que la ira estaba llegando. Entonces antes de dejarla actuar sobre mi yo actuaba sobre ella analizando mi estado en aquel momento. Mi respiración, mi calor corporal, el latido de mi corazón, mi posición física, etc.
2. Notaba el cambio físico y esa alarma me indicaba que la ira estaba buscando alimento. Como debía negárselo tenia tres opciones, la primera alejarme del lugar donde se provocaba la riña sobre todo a un principio cuando no podía controlar mi raciocinio y la emoción al mismo tiempo hasta que mi cuerpo físicamente regrese a la normalidad y yo podía analizar la solución en otro estado. Como segunda opción una vez que conocía mi cuerpo físicamente cambiaba mi atención hacia otra cosa, inmediatamente antes de reaccionar, por ejemplo otro objeto o recordando una responsabilidad que debía presentar, este truco confunde la mente y por ende la emoción, como cuando estas leyendo y de pronto un ruido te desvía del libro, para cuando deseas volver a leer te preguntas “donde estaba?”, la misma pregunta en tu mente fragiliza la ira del momento. Una tercera opción una vez que se conoce el cuerpo es observar como una tercera persona. En ese momento eres el espectador de lo que esta sucediendo, te ves ahí en la riña, la otra persona, la situación y te preguntas “Que podría hacer yo en este momento para solucionar esta situación sin llegar a la ira?”.
3. Una vez que tomaba una de las tres opciones la ira se iba debilitando…se iba muriendo poco a poco porque yo ya no la alimentaba mas. Llega un momento que no la sientes llegar porque se murió y ese momento eres libre. Bueno en otra oportunidad escribiré acerca del ego que es un concepto que se relaciona en cierto sentido con la ira.
La situación paso, la discusión se fragilizo, el tiempo paso. Si logras pasar estos tres simples pasos felicítate, y lo digo de veras si al menos una vez lograste no alimentar tu ira comienza por reconocer que estas cambiando y debes amarte mucho, darte alivio! Sentirte FELIZ porque es un gran paso. Te eliminaste las eternas frases de “Soy un irascible, no debí decirle esto o aquello, no debí romper aquello, no debí reaccionar así, no debí , no debí, no debí”…Te arrepientes, pides perdón, te pasaste horas de amargura, o quizás un dia, semanas, en fin luego te odias y recurres a un vicio.
Pero si no sucedió la ira te has regalado varias horas de PAZ y muchos dicen que la felicidad es LA PAZ…cambias porque quieres a esa persona, materia, o una mejor calidad de vida…dime, tu felicidad no merece tu esfuerzo?...